Hay mapas que no se hacen con líneas, sino con letras. Palabras que nombran territorios invisibles: la memoria, el cuerpo, la rabia, el deseo, la raíz. Eso es justamente el Mapa de Escritoras Mexicanas, una iniciativa que pone en el centro a las mujeres que están escribiendo —hoy— desde todos los rincones de México.
Este proyecto es más que una base de datos: es una forma de mirar el país a través de sus voces femeninas. Voces que escriben desde la selva, la sierra, la frontera, la ciudad o el desierto; desde lenguas diversas, géneros híbridos, experiencias íntimas o colectivas. Es, en esencia, una geografía literaria viva y múltiple.
Algunas voces que habitan el mapa:
Aquí te comparto algunas autoras que puedes encontrar en el mapa, con fragmentos que nos dan una ventana a sus mundos:
Iveth Luna (Chihuahua)
Poeta y narradora, su trabajo ahonda en la violencia, la maternidad y la resistencia femenina.
“Mi madre me enseñó a no llorar,
pero yo lloro.
Mi madre me enseñó a esconder la herida,
pero yo la muestro como bandera.”

Yolanda Segura (Querétaro)
Su obra cruza el ensayo, la poesía y el activismo, con una mirada aguda sobre el lenguaje, la educación y el género.
“¿Quién nombra las cosas?
Quien las nombra, las posee.
Yo quiero nombrarme hasta desobedecerme.”

Citlalli Grijalva (Morelos)
Poeta con una voz luminosa, mezclando lo ancestral y lo contemporáneo, lo ritual y lo cotidiano.
“Traigo el volcán en el cuerpo
y una lengua que no se deja domesticar.”
El mapa no solo presenta a autoras consagradas, sino que también es una plataforma para escritoras emergentes, muchas de ellas fuera de los grandes circuitos editoriales. Su formato colaborativo permite que cualquiera pueda proponer nuevas escritoras, ayudando a expandir la red.
Además, el proyecto organiza encuentros literarios, charlas y talleres para tender puentes entre las autoras y sus lectorxs. El próximo gran encuentro será en noviembre de 2025, una cita imperdible para quienes habitan (y cuidan) el territorio de la palabra.
Puedes visitar el proyecto en su Instagram oficial o sumergirte directamente en el mapa para conocer nuevas voces, nuevas rutas, nuevas formas de habitar el lenguaje.
Porque a veces, para encontrarnos, hay que leer el país desde la escritura de sus mujeres.