Con las marcas cambiando constantemente y evolucionando para poder sostenerse en el mundo actual, algunas marcas de belleza y lujo se están quedando en el pasado. Marcas que tienen su base en la elegancia y riqueza no tienen valor y apego emocional con las mujeres y hombres de hoy. Durante los ’60s y 70’s eran pocas las mujeres que compraban sus propias joyas; Por una parte no había muchas trabajadores, por lo que no podían gastar su dinero en objetos costosos, pero también porque joyería era un regalo típico de un hombre hacia una mujer.

Hoy, la industria se ve completamente diferente: La mayoría de las compras vienen de mujeres comprando para ellas mismas, y por ello se han convertido en la audiencia principal de sus campañas. Las mujeres ahora son trabajadoras, jóvenes, solteras y divertidas.

En el 2016 Tiffany and Co., comenzó su evolución teniendo como embajadoras de la marca a distintas mujeres que representan a sus nuevos clientes, y cada año proponen algo diferente y divertido. Este año no fue diferente, creando una espectacular campaña con encabezada por Elle Fanning, donde pintaron a Nueva York del clásico color azul de la marca, el cual duró toda esta semana.

Campañas como estas reflejan que las marcas ya no deben de tener seriedad y sobriedad para mantener su estatus, y que si desean seguir en el mercado futuro deberán adaptarse a sus nuevos clientes.

Crédito de fotografías: Tiffany & Co.